Valores

1. Respeto:

Reconocer y honrar la libertad de cada individuo de ser como es, así como el lugar que ocupa en su familia y en la existencia. El respeto es la base para la aceptación incondicional de todos y todo.

 

2. Inclusión:

Asegurar que nadie sea excluido, reconociendo que todos tienen un lugar necesario y valioso en el sistema familiar y en la vida. La inclusión promueve la sanación y la armonía.

 

3. Gratitud:

Cultivar una actitud de agradecimiento hacia la vida, los ancestros y las experiencias que han dado forma al presente. La gratitud es una fuerza transformadora que abre el corazón y facilita la reconciliación.

 

4. Amor incondicional:

Entender el amor como el motor principal del crecimiento y la evolución. Este amor se expresa a través del respeto, la inclusión y la gratitud, y es la base para construir relaciones sanas y armoniosas.

 

5. Asentimiento a la vida:

Aceptar la realidad tal como es, sin juicios ni resistencias. El asentimiento permite encontrar paz y reconciliación con la vida, incluso en las circunstancias más difíciles.

 

6. Conciencia sistémica:

Reconocer la interconexión de todos los miembros de un sistema familiar y social. La conciencia sistémica permite comprender cómo las acciones individuales afectan al todo y cómo la inclusión de todos promueve la armonía.

 

7. Ética y responsabilidad:

Actuar con integridad, humildad y compromiso en la difusión y aplicación de las constelaciones familiares. Izcallo valora la responsabilidad hacia las personas que acompañan y hacia la sociedad en general.

 

8. Crecimiento y evolución:

Fomentar el desarrollo personal y colectivo como un camino hacia la plenitud y la armonía. Izcallo cree en la capacidad de las personas y los sistemas para evolucionar y sanar.

 

9. Servicio a la vida:

Poner el bienestar de las personas, las familias y las comunidades en el centro de todas las acciones. El servicio a la vida es el propósito fundamental de Izcallo.

 

10. Reconciliación:

Facilitar procesos de sanación que permitan a las personas reconciliarse con su historia, sus relaciones y consigo mismas. La reconciliación es un paso esencial hacia la paz interior y la armonía en las relaciones.